En el Londres de finales del siglo XIX coincidieron los espectaculares éxitos de Dan Leno, el hombre más divertido del mundo según la crítica teatral de la época; la miseria de un actor sin suerte. Charles Chaplin, y el encuentro en la sala de lectura del Museo Británico de Karl Marx y George Gissing, en unos días en el que la ciudad se despertaba a menudo con la noticia de un nuevo asesinato sin resolver. Siguiendo los pasos de ese enigmático asesino, que los gacetilleros no tardaron en bautizar como el golem de Limehouse, Peter Ackroyd nos invita a adentrarnos en el sórdido mundo del Music Hall decimonónico con una novela en la que la que la intriga, la creación de ambientes y la fuerza de los personajes logra un grado de equilibrio ejemplar. Como ya hiciera el último testamento de Oscar Wilde y en Chatterton, Peter Ackroyd consigue, una vez más, renovar el género de la novela histórica.