Nadie contra nadie.

Durante la Semana Santa del año 2000, una serie de estampidas aparentemente organizadas en distintos  puntos de la ciudad extendieron el pánico en plena Madrugá sevillana. Los incidentes parecían inspirados en Nadie conoce a nadie, novela publicada cuatro años antes por Juan Antonio Bonilla y que Mateo Gil llevó al cine poco después, convirtiéndose en un fenómeno cultural. El caso,...